Esta es una historia muy realista y al mismo tiempo muy surrealista. Tu me dirás que te parece…
– Hola Pepe, ¿estás currando?
– Que va, tío. Estos políticos sinvergüenzas tienen la culpa de todo. Nos tienen en la miseria.
– ¿Y cómo lo llevas entonces?
– Muy mal. Por lo menos estoy cobrando la ayuda familiar.
– ¿La ayuda familiar? ¡¡¡Vaya miseria!!! Con eso no se puede vivir.
– Claro que no, tío. Y gracias a que hago algunas chapuzas y tengo algo más de ingresos.
– Caramba!!! … Pues yo necesito reformar mi cuarto de baño. ¿Tú podrías?
– Sin problemas. Además, te cobraré muy barato. Sin factura y sin IVA. Sólo tienes que pagarme al contado.
– Qué bien. Entonces iré mañana a pedir el permiso de obra.
– No, no… Ni se te ocurra. Yo trabajo en negro. Además, ¿quién se va a enterar? Yo la reforma te la hago en un par de días. Cuando te vengan los guardias a multar (si vienen) yo ya habré terminado.
– Ah, pues muy bien. ¿Podrías empezar esta semana?
– Ufff… Imposible. Me voy de viaje con los niños a Disneyland París. Se lo tenía prometido. Pero la próxima semana te lo hago sin falta.
– Vale, vale. ¿Te viene bien por las tardes?
– Por la tarde fatal. Los niños salen del colegio a las cinco, y tengo que recogerlos para llevarlos al fútbol.
– ¿Que salen del colegio a las cinco…?
– Sí. Como tengo pocos ingresos la Junta me subvenciona el comedor y las actividades extraescolares.
– ¡Ostras! Qué bien. Oye, por cierto, ¿esa furgoneta es nueva?
– Si, tío. Tiene sólo una semana. La uso para las chapuzas que me salen.
– Ahhh… ¿Y cómo la has financiado?
– La pagué al contado. Yo no puedo financiarla con mis ingresos. La he puesto a nombre de mi padre, (que tiene una minusvalía), y me han hecho un buen descuento. Y como es minusválido no pago ni el impuesto de circulación.
– Vaya. Que chollo. Por cierto. Y qué haces por aquí en el centro, ¿tu no vives en un barrio de la pariferia?
– Sí, pero traigo a la peque a esta guardería. Nos gustaba mucho más. Tienen más actividades y está en una mejor zona.
– ¿Y cómo has conseguido que entre la niña en esta guardería de élite?
– Porque mis suegros viven en esta calle y mi mujer está empadronada con ellos. Gracias a eso nos dieron muchos puntos.
– ¿Tu mujer está empadronada con sus padres? Pero vosotros estáis viviendo juntos, ¿no?
– Sí, tío. Pero como no estamos casados nos venía bien para que mi mujer cobrara una ayuda de madre soltera y de paso para los puntos de la guardería.
– Vaya. Pues menos mal que tu mujer tiene esa ayuda. Si no, no sé cómo podríais llegar a fin de mes.
– Claro, tío. Pero ahora, para colmo de males, se le acaba el PER.
– ¿Ella está cobrando el PER? ¿Ha trabajado en el campo?
– ¡Qué va! Ella no tiene ni idea de trabajar en el campo. Pero tenemos un amigo que tiene unos terrenos agrarios y nos hizo un favor; como sabe que estamos en paro y tenemos tres niños, le hizo a mi mujer un contrato de seis meses. Sólo tuvimos que pagarle la Seguridad Social y un regalito que le hicimos. De esa forma, a mi mujer le correspondía un año de PER.
– ¡Vaya suerte! Bueno, venga, te invito a una cerveza.
– No puedo, tio. Me voy corriendo. Voy al cine con la familia.
– ¿Al cine? Pero hoy no es “el día del espectador”. Te va a costar un pastón.
– Naaaa… Con el carnet de familia numerosa y el de minusvalía de mi padre (tapándole con el dedo la foto) me sale tirado el precio de las entradas. Nosotros vamos al cine casi todas las semanas.
– ¡Qué bueno! Oye, por cierto. Me acabo de acordar que mi cuñado ha montado una empresa de construcción. Si quieres puedo hablar con él y que te consiga un contrato de seis meses. No es mucho, pero al menos metes la cabeza en la empresa. Y quién sabe… A lo mejor te acaba contratando indefinido. Tú eres un currante muy bueno.
– Ufff… Qué va, tío. Por seis meses no me merece la pena. Además, perdería el derecho a las ayudas. Te lo agradezco pero no me arriesgo.
– Bueno, como quieras. Sin problemas. Era mirando por ti. Oh. !!!Mira, mira lo que está saliendo en la tele. Otro caso de corrupción política!!!
– ¡¡¡Qué asco, tío!!! Si es que estos políticos son unos corruptos y unos sinvergüenzas. Abusan de nosotros y tienen al país en la ruina. Se aprovechan de cualquier resquicio para sacarnos el dinero y estafarnos. ¡¡¡Deberían de estar todos en la cárcel!!!
¿Que te parece el cuento? ¿Exagerado, o real? Tu dirás…